Adam Raga (Gas Gas) tenía, desde hace dos años, una espina clavada en el Palau Sant Jordi y ayer, en un final impresionante, se impuso por tres puntos a Toni Bou (Montesa), actual campeón del mundo, en el Trial Indoor de Barcelona ante diez mil espectadores.
La manga final la disputaron Raga, Bou, vencedor de la primera prueba de la temporada en Marsella, y Albert Cabestany (Sherco). Cabestany quedó totalmente descartado con tres fiascos (cinco puntos de penalización por no superar una zona) en las cuatro primeras zonas. Todo parecía favorable para Toni Bou, que llegaba al intermedio del recorrido (siete zonas) con tres puntos menos de penalización. Un fiasco en la octava zona le descentraba y aunque Raga cometía una doble penalización (dos veces pie en tierra) en la novena, el barcelonés fallaba con un nuevo fiasco en la antepenúltima zona.
Raga llegaba así a la última zona con seis puntos de ventaja y con la victoria ya en el bolsillo. Aunque sumó tres puntos de penalización (dos por pie en el suelo y uno por tiempo), recuperaba la senda de victorias en la Ciudad Condal.